Edward Gaitán estudió su secundaria en el colegio Faro de Luz del municipio de San Juan de Oriente, su promoción de bachiller fue en el año 2020 y quienes lo conocieron en esa etapa de su vida lo describen como un joven tranquilo y sociable.
Era un alumno promedio en su rendimiento académico, y sus compañeros se muestran sorprendidos por el acto atroz que le señalan, como es el asesinato de su hermano Holman Gaitan de 7 años.
"Él nunca se mostró violento en el salón de clase, solo una vez que una profesora lo regañó porque no había hecho la tarea, en ese instante le alzó la voz, pero al día siguiente se disculpó con ella", relata una de sus compañeras de clase.
Rolando Avendaña Zambrana, gerente del Restaurante La Olla de Barro, relató que Edward Gaitan trabajó cerca de un año, como bartender y lo recuerda, como un joven respetuoso que llegaba con gran disposición de trabajo y nunca mostró signos de violencia o mala conducta.
"Cuando iba a cumplir un año de trabajo me entregó su renuncia, argumentando que se iba a trabajar a uno de los restaurantes del Mirador de Catarina, porque le ofrecieron más días de trabajo, ya que aquí solo trabajaba los días domingo y el necesitaba más dinero para pagar los gastos de la universidad", relata Avendaña.
Un amigo mesero de este restaurante recuerda a Edwar, como un joven tranquilo y relajado, pero con falta de afecto de su mamá, porque solo vivía con su padre y madrastra.
“Él era amante de los gatos, posteaba fotos de ellos y de animes en su perfil de facebook, en la etapa que lo conocí no tenía vicios, pero creo que su conducta cambió cuando ingresó a la universidad en Managua y se fue a trabajar al Mirador de Catarina", relata uno de sus compañero de trabajo.
Edward Gaitán Gallegos, de 21 años, es sospechoso de haber cometido parricidio. Según las autoridades tenía previsto lanzar el cadáver a las laderas de la Laguna de Apoyo.
El presunto criminal no pudo desaparecer el cadáver del niño, a quien estranguló, porque los pobladores de Catarina, departamento de Masaya, pasaron en vela la noche del domingo acompañando a los padres que buscaban con desesperación al niño, según la fuente policial.
El joven incluso compartió en sus redes sociales una foto de su hermanito pidiendo colaboración para dar con el paradero del niño. Después del hallazgo del cadáver del pequeño, se conoció que el presunto asesino jugaba Free Fire en su teléfono celular.