Yericson Josué Herrera Torres, de 20 años de edad, fue sentenciado a 35 años y medio de cárcel por abusar de dos niños cuando los menores salían de la Escuela Dominical de una iglesia, ubicada en un barrio de la parte norte de la ciudad de Estelí.
Según el relato, el 24 de abril del año en curso, los menores 8 y 9 años de edad estaban a punto de salir de la escuela dominical cuando Herrera, quien habita cerca de la iglesia, los interceptó y con engaños los invitó a jugar a su casa pero su intención era otra.
Una vez que los niños estaban dentro de la vivienda, el hombre los ató y abusó de ellos. Tras cometer el ilícito, los niños fueron amenazados vilmente por el acusado, impidiendo que los pequeños contaran lo sucedido.
Sin embargo, uno de los padres de familia al notar el extraño comportamiento de su hijo decidió conversar con él y el niño le contó lo ocurrido. De inmediato, los familiares interpusieron la denuncia contra Herrera, quien después de un proceso judicial fue declarado culpable por el delito de violación en contra de los dos menores de edad.
Lea además: Declaran culpable a esteliano por abusar sexualmente a dos menores de edad
La jueza suplente María Eugenia González, del Juzgado Especializado en Violencia de Estelí, sentenció al sujeto a 35 años y medio de cárcel. Al ser delitos que no están contemplados en ley de prisión perpetua, el delincuente sólo purgará 30 años de cárcel.
La madre de una de las víctimas indicó que con esta sentencia se hace justicia, aunque agregó que ese hombre le arruinó la vida de los dos menores, incluso, una de las familias afectadas tuvo que abandonar el barrio para evitar problemas con los parientes del acusado.
"Como madre me siento satisfecha, que él pague lo que hizo, todo lo que se hace tiene un pago, aunque sus familiares siempre han hablado pero no importa, yo lo que quería era que se hiciera justicia y gracias a Dios se hizo, vamos (saliendo) adelante", manifestó la mamá de uno de las víctimas.
De acuerdo con la mamá del menor, su pequeño ha estado participando en terapias psicológicas para tratar el trauma causado. "Él siempre está miedoso de andar en las calles, pero ahí va superándolo de poco a poco", expresó.
