La crisis económica y sanitaria por la pandemia del nuevo coronavirus ha provocado el cierre temporal de varios negocios y desempleo en el mundo. Nicaragua no escapa de esta realidad.
En la ciudad de Estelí, algunos dueños de negocios de comida, restaurantes, cafeterías y pequeñas fábricas procesadoras de tabaco han suspendido operaciones y mandado a descanso a sus colaboradores sin derecho a salario, por la falta de solvencia económica.
Los vendedores informales también han comenzado a sufrir los efectos, al no ajustar el dinero suficiente para la manutención de sus familias, pues los potenciales clientes salen menos a la calle y compran lo más necesario.
Esta condición provoca el estrés y la depresión de los negociantes, pero la solución no está en encerrarse en casa, acudir a la automedicación o perder el control emocional.
Este es el tiempo de redescubrir las habilidades y capacidades que se tienen como ser humano, aconsejó en Noticias ABC la psicóloga clínica Auxiliadora Sequeira.
"Hay estrategias que debemos usar, por ejemplo: la lectura de la Biblia para las personas asiduas a creer mucho en Dios; leer libros constructivos; afanar la limpieza de la casa; hacer un jardín; evitar al máximo estarnos llenando nuestra mente de exceso de información, debemos estar pendiente de nuestro autocuido personal; mantener un estado de optimismo", sugirió Sequeira, quien invita a "sacar lo que llevamos adentro, la fuerza interior que debe estar siempre permanente en el diario vivir".
