Indira García Canales de 17 años de edad fue ultimada en una comunidad de La Trinidad, Estelí. Quería ser enfermera pero sus sueños fueron frustrados por el hombre que conoció a través de WhatsApp.
El pasado miércoles 07 de noviembre la adolescente Indira Esperanza García Canales fue brutalmente apuñalada por su pareja cuando esta amamantaba a su bebé. Su madre Indira María Canales, quien no podía contener las lágrimas, dijo que su nieto pasa llamando a su mamá toda la noche.
El menor de un año y medio de edad pasaba siempre con su madre, a quien esperaba con mucho afán que regresara del trabajo a su casa.
Ervin José Blandín Espinoza (también apellidado Fernández) de 26 años de edad tenía doble cara, dice Harold García, papá de Indira.
Don Harold García relató que este hombre, a quien su hija conoció a través de las redes sociales, no aparentaba ser violento y hasta estuvo con él en Costa Rica donde fueron a trabajar.
García agregó que su hija de 17 años le había confesado a su madre qué Ervin José la había agredido a patadas porque estaba celoso debido a que la muchacha comenzó a trabajar en un kiosco del hospital San Juan de Dios de la ciudad de Estelí, propiedad de una tía.
Indira tenía el sueño de estudiar enfermería y su anhelo la hizo esforzarse y bachillerase como una estudiante sobresaliente. ?Pero todo quedó truncado?, expresó don Harold García, quien dijo presentir la muerte de su hija. A continuación sus palabras:
El viernes fueron enterrados los restos de Indira Esperanza en el cementerio municipal de La Trinidad, después de una misa oficiada por su tío, el sacerdote Joemán García, quien ejerce su ministerio en España, pero vino hace unos días a su comunidad natal El Tomabú para despedir a su padre, a quien también le ofició una misa de cuerpo presente, sin imaginar, que también realizaría una misa por el alma de su joven sobrina.