Por más de 20 años prestó su servicio como socorrista voluntario en la Cruz Roja filial Estelí. Tenía muchos conocimientos en primeros auxilios, rescate de personas en accidentes vehiculares, estructuras colapsadas y salvamento acuático, entre otras especialidades.
Hablamos de Gustavo Adolfo Olivas Díaz, reconocido y destacado cruzrojista, quien la mañana de este domingo 29 de agosto fue vencido por la muerte después de permanecer durante varios días luchando por su vida en el Hospital San Juan de Dios de Estelí.
Desde el inicio de la pandemia del coronavirus, junto al resto de compañeros de trabajo, Gustavo salvó un sinnúmero de vidas trasladando a personas hacia las unidades de salud, pero ahora le tocó a él partir físicamente de este mundo en el cumplimiento de su deber.
Siempre amigo, servicial y leal, Gustavo Olivas supo ganarse el corazón de quienes compartieron con él. Hace varios días, sus colegas, amigos y familiares habían iniciado una jornada de oración pidiendo por su pronta recuperación, ya que querían verlo activo nuevamente y compartir con él aquel carisma que lo caracterizaba.
No obstante Gustavo falleció y al difundirse la lamentable noticia, las lágrimas han sido difíciles de contener entre quienes a lo largo de su vida tuvieron la oportunidad de conocerlo. Su muerte fue anunciada con el sonar de la sirena del Benemérito Cuerpo de Bomberos de Estelí.
Gustavo Olivas, conocido cariñosamente como Fito o Tavo, antes de formar parte de la Cruz Roja, trabajó en un canal de televisión local, donde también dejó una huella inolvidable.
Tras la salida del féretro de Gustavo Olivias del hospital, fue acompañado por una caravana vehicular hacia la vivienda de su madre, ubicada en el barrio Juno Rodríguez, de Estelí.
A eso de las nueve de la mañana de hoy está previsto un homenaje póstumo en las instalaciones de la Cruz Roja, luego se llevará a cabo una misa de cuerpo presente y a continuación sus honras fúnebres en el cementerio municipal San Francisco de Asís.
En nombre del equipo de Radio ABC Stereo y de la población que recibió su mano amiga, hoy le decimos a Dios a un gran ser humano y elevamos nuestras plegarias a Dios para que le dé fortaleza a su familia. Gustavo Olivas, descanse en paz.