Desde el pasado lunes 20 de abril, los productos lácteos han experimentado una baja de cinco córdobas en el mercado Alfredo Lazo de la ciudad de Estelí. La disminución, según los comerciantes de este populoso centro de compras, está asociada a la producción acumulada que mantienen los productores y que no han podido exportar a otros países de la región centroamericana.
El Salvador es uno de los principales mercados, sin embargo, desde el cierre de fronteras por la pandemia de coronavirus ha decaído la demanda y eso hace que los productores bajen el precio y que los consumidores locales paguen menos, manifestó el comerciante mayorista Tomas Miranda.
De acuerdo con Miranda, los precios al por mayor del queso fresco se cotizan en 45 córdobas en el mercado, mientras que el queso seco mantiene un precio de 55 córdobas. Aclaró que a través de la red de distribución este mismo producto puede alcanzar los 50 córdobas para las pulperías, mientras que la crema se vende en 60 córdobas la libra.
"El queso seco está a 50 córdobas, el queso fresco a 45, la borona a 40 córdobas, estamos trayendo cuajada para dar a 40 al por mayor, el quesillo está a 50 córdobas la libra. Hemos tenido una baja de hasta 10 córdobas, en menos de 6, 7 días", detalló Miranda, quien agregó que la baja en el precio del combustible también contribuye a la disminución del precio de los productos lácteos.
Lea también: Agricultores del norte siguen trabajando para sobrevivir y garantizar cosecha
"El combustible ha bajado por litro, nosotros gastábamos hasta siete mil córdobas en el transporte, ahora estamos gastando cuatro mil, todo esto es un precio favorable para la población y los comerciantes", expresó el comerciante.
Por su parte, María Isabel Cerros Bonilla, quien también oferta derivados de la leche en el mercado Alfredo Lazo, manifestó que pese a los bajos precios, las ventas no han sido las mejores pero coincide con Miranda que es probable que los precios continúen bajando.
