La siguiente información incluye el relato de una sobreviviente de violencia sexual, por respeto y seguridad, no revelaremos su identidad y la llamaremos Karen.

Karen es una joven esteliana que durante muchos años tuvo que callar y llorar mientras sufría acoso por parte de su abuelo, cuando apenas tenía 6 años de edad y pensando que esto terminaría, decidió contarlo a su abuela paterna, sin embargo, ella nunca le creyó.

Salirse de casa de sus abuelos e irse donde su madre pensó que era la solución, pero fue peor, ya que su padrastro también comenzó a abusarla sexualmente, por lo que su vida se trasformó en un infierno.

A los 13 años, siendo Karen apenas una adolescente, había perdido la libertad y sus estudios para convertirse en un objeto sexual, ya que su padrastro la abusaba cuantas veces quería hasta el punto de embarazarla y aun así tampoco su madre le creyó, por lo que consideró que su vida estaba terminada y que la única opción era acabar con su vida.

Pese a las adversidades, Karen ha aprendido a valorarse como ser humano gracias a la ayuda oportuna, pero entre el anonimato, igual que ella, pueden haber otras mujeres víctimas de maltrato físico, psicológico y sexual, que no se atreven a hablar por miedo, ni a denunciar a sus victimarios, buscando como solución el suicidio.

"Mi abuelito me manoseaba, me enseñaba su parte íntima, después me mandó para donde mi mamá diciéndole que yo tenia queridos. Pero donde mi mamá fue peor, llegaba un hombre que a ella le gustaba y lo llevó a vivir a la casa, a los pocos meses, el hombre abusó de mí, le dije a mi mamá y no creyó en mí, le dije al vecino que sí me creyó pero no pudo hacer nada por mí", relató Karen a Noticias ABC.

Producto de los abusos, quedó embarazada. "Cuando nació mi niño, mi mamá dijo que esperaría a ver a quien se parecía, entonces el hombre que me abusó decía que mi hijo era de unos vagos, yo viví un infierno. Pero ahora he logrado ser feliz, porque ya nadie me abusa, me trata, ni me cela, ni me calumnia", expresó está sobreviviente de violencia sexual.

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Ideas suicidas

A nivel local no existen estadísticas de cuantas mujeres han decidido terminar con su vida, pero si se conoce que de cada 30 mujeres que presentan demandas por divorcios y pensiones económicas para sus hijos, 10 han sido víctimas de violencia y han tenido ideas suicidas.

Auxiliadora Hurtado, psicóloga clínica de la Asociación de Mujeres Proyecto Miriam, manifiesta que la mayoría de mujeres que acuden a presentar una demanda en contra de sus cónyuges, antes deben pasar por asistencia psicológica.

"Al inicio vienen por asesoría legal por pensiones de alimentos, sin embargo, después de hacerles varias entrevistas y se les consulta si han vivido violencia, la gran mayoría o las que se divorcian es por violencia", explicó Hurtado.

"Muchas mujeres también caen en depresión y tienen ideas suicidas porque ni hallan la forma de cómo salir de ese ciclo, los sentimientos de culpa. Incluso cuando se trata de una separación, sus parejas les dicen que ellas son las responsables de destruir el hogar", añadió la psicóloga.