El 11 de febrero se celebra el Día de la Mujer Médica, en honor a la fecha en que Elizabeth Blackwell se convirtió en la primera mujer en graduarse en medicina en Nueva York.
Su recorrido no fue fácil: antes de ser aceptada en esa institución, otras 10 universidades rechazaron su postulación. En esa época, las carreras universitarias estaban reservadas solo para los hombres.
En Nicaragua, la primera en estudiar una carrera de sanidad fue Concepción Palacios en el año 1927 y desde entonces varias mujeres han seguido ese legado, se han convertido en doctoras y especialistas.
La doctora Vanesa Talavera, de Somoto, Madriz, ha optado por la medicina natural, dedicando su vida a mejorar el bienestar de la población a través de métodos, materiales y productos naturales.
Quizá le interese: Impulsan iniciativa para brindar terapias psicológicas gratuitas a médicos y estudiantes de medicina
Talavera nació en la ciudad de Estelí y creció en Somoto, donde desde pequeña recibió el cuidado de sus padres con una alimentación saludable que sentó las bases de su futuro. La influencia de su hogar la inspiró a estudiar química y farmacia, sin embargo, su deseo de profundizar en el cuidado de la vida la llevó a cursar un diplomado en medicina natural con especialistas en México.
No satisfecha con solo un diplomado, optó por una segunda carrera: medicina natural, obteniendo su título de médico naturo-ortopático, que combina la medicina convencional con la natural, y a ello se suman sus conocimientos de química y farmacia.
Desde hace más de diez años ha estado brindando atención gratuita a los somoteños cada lunes, un gesto que refleja su compromiso con las familias que más necesitan la medicina alternativa.