En el corazón del barrio El Calvario de la ciudad de Estelí se encuentra una comerciante excepcional que ha dejado su huella en el paladar de los norteños. Doña Martha Montenegro Chavarría, una mujer con una pasión desbordante por la cocina.
Con 25 años de experiencia en el arte de preparar nacatamales, doña Martha ha ganado renombre y prestigio gracias a su dedicación y la conservación de la receta auténtica y original, lo que garantiza un sabor único en cada bocado.
Doña Martha es madre de cuatro varones y comenzó su negocio como una forma de lograr independencia económica y laboral. Inspirada por su amor hacia la cocina y la tradición culinaria de Nicaragua, decidió aventurarse en este mundo de negocios.
Doña Martha selecciona cuidadosamente los ingredientes y eso ha llevado a que sus productos sean llevados a otros países, incluyendo Estados Unidos. Los nicaragüenses en el extranjero anhelan el sabor auténtico de su tierra natal y doña Martha se ha convertido en su puente gastronómico.
Doña Martha comenta que cada nacatamal es preparado con amor y dedicación, siguiendo meticulosamente la receta que ha pasado de generación en generación en su familia.
La combinación perfecta de masa de maíz, carne de cerdo sazonada, papas, arroz, pasas y aceitunas, envueltos en hojas de plátano y cocinados a fuego lento, transportan a quienes los prueban a los sabores más auténticos de Nicaragua.
