Conmocionado se encuentra el poblado de Santa Rosa de Olaskincito, jurisdicción de la microrregión de Wamblán, en Wiwilí, Jinotega, luego de que un menor que estuvo desaparecido por unas horas fuese encontrado sin vida y con signos de violencia.
El menor era de apellido Acuña y tenía 10 años de edad. Su cuerpo yacía sin vida, a unos 25 metros de un camino, con grandes heridas en su abdomen y sus vísceras expuestas.
El padre del menor manifestó a las autoridades policiales que el martes su hijo salió en busca de unas peras de agua y al caer la noche se quedó donde un amigo.
El señor indicó que, le permitió a su hijo quedarse donde su amigo, puesto que ya había caído la noche, con la condición de que en la mañana llegara a casa. De acuerdo a sus declaraciones, el niño fue enviado por el amigo a eso de las 9 de la mañana, sin embargo, el menor no llegó a su vivienda.
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Tras observar que su hijo no llegaba, en coordinación con miembros de una iglesia, empezaron la búsqueda del niño, encontrando la fatal escena a eso de las 6 de la tarde de este miércoles 15 de febrero.
El padre del menor está seguro de que su hijo no murió por una caída, tampoco por el ataque de un animal, sino que fue asesinado con machete por personas no identificadas.
El progenitor del niño, es padre soltero, puesto que su esposa falleció hace 5 años y su hija mayor era quien cuidaba la vivienda mientras ellos salían hacer labores agrícolas.
Varios equipos de la Policía Nacional se presentaron al sitio para investigar el caso que mantiene en alarma a ese poblado jinotegano.
