Colaborador
Yessenia Centeno
Pretender la venta de una propiedad cuando ésta estaba hipotecada es el delito que le imputan al abogado Alexis Aguilar, quien enfrenta un juicio oral y público por el delito de estafa agravada y será un tribunal de jurado que determine su culpabilidad o inocencia.
Según la acusación formulada por el Ministerio Publico, el delito se cometió entre noviembre del año 2008 y noviembre del 2009, fecha en que el procesado y las víctimas Heidi Turniel Castillo y Axel Manuel Ruíz Vílchez, acordaron la compra del bien inmueble ubicado en el barrio Estelí Heroico en la ciudad de Estelí.
El fiscal Marvin Degadillo dijo a los miembros del Tribunal de Jurado, que las pruebas demostrarán que el litigante usó dos escrituras públicas de una misma propiedad para engañar a las víctimas y prometer vendérselas en doce mil dólares, a sabiendas que él la tenía hipotecada en una entidad bancaria de esta ciudad.
Según la fiscalía, el procesado engaño al matrimonio al asegurarles que la vivienda no se las entregaba porque en ese momento no contaba con la escritura pública, además el bien inmueble estaba ocupado.
Por su parte la abogada acusadora adherida al Ministerio Publico Mayerling Cardoza, dijo al mismo tribunal de jurado, que las victimas para evitar perder la propiedad compraron la misma a un banco en más de cinco mil dólares, pagando en total 17 mil dólares, cuando el costo de dicho bien inmueble era de doce mil dólares.
El abogado Alexis Aguilar en su defensa dijo a los miembros del Tribunal de Jurado, que él nunca hizo el trato con las supuestas víctimas, sino con el abogado Víctor Ruíz, con quien presuntamente acordó una promesa de venta por la propiedad, ya que la misma estaba ocupada por un familiar de su esposa.
El abogado también rechaza que él haya tenido hipotecada la propiedad, y alega que fue otra entidad bancaria la que habría reestructurado un crédito de una camioneta, reiterando que jamás pudo haber engaño al señor Víctor Ruiz porque este también es un profesional del derecho.
Cabe señalar que el procesado también cuestionó ante el Tribunal de jurado, que las supuestas víctimas en esta causa hayan esperado ocho años para entablar la acusación por un delito que asegura él nunca cometió.
