El Barça se impone al Atlético en el último suspiro. Con más furia que juego, el cuadro azulgrana derrota al conjunto de Simeone en el Vicente Calderón por 1-2. Rafinha y Messi marcaron para el Barcelona, mientras que Godín firmó el transitorio empate del equipo local. Ni el rombo que se inventó Luis Enrique en la medular, le dieron al Barça el control del balón.
Luis Enrique dibujó un 3-4-3, con Messi como enganche, pero el Barcelona sucumbió frente a la presión del Atlético, inteligente para esperar al cuadro de Luis Enrique en su campo, profundo en ataque para buscarle las costillas a la defensa azulgrana. Sin dueño, el partido fue atractivo por disputado, ninguno de los dos le quería perder pisada al líder el Real Madrid. Se vaciaron físicamente los muchachos de Simeone y Luis Enrique en el primer acto; en el segundo, en cambio, se cambió la fricción en la mitad del campo, por la acción en las áreas.