En cada pedaleada cae una gota de sudor que inspira a seguir adelante, porque entre más extensa e inclinada sea la pendiente, siempre hay un esfuerzo extra de piernas y mente. Así lo viven día a día muchos ciclistas, quienes han convertido este deporte en una herramienta integral, que les ayuda a mejorar la salud física, mental y emocional.
Aunque muchos creen que pedalear es solo "cuestión de piernas", Noe Isaac Briones, un joven de 25 años y exciclista del equipo Real Estelí, sabe que este deporte exige un entrenamiento fuerte, buena alimentación y, sobre todo, tener disciplina si se quiere llegar a un nivel competitivo y para él, lo más importante, es siempre cruzar la línea de meta.
Más allá del rendimiento físico, el esteliano Milton Morazán Gutiérrez encontró en el ciclismo una forma de disfrutar los paisajes, pero también, es un deporte que le brinda beneficios en su salud mental, ya que durante las noches le ayuda a conciliar mejor el sueño y sobretodo a tomar buenas decisiones, ya que tener una buena mentalidad ayuda a vencer al cansancio y las dificultades de la vida.
Roberto Carlos Olmedo, originario de Quito, Ecuador, tiene tres años de vivir en la ciudad de Estelí y comenta que ha encontrado la forma de aprovechar el ciclismo para liberarse del estrés del día a día del trabajo, a la vez que consigue mantener su cuerpo saludable.
De igual manera, Olmedo compartió que el ciclismo es más que pedalear, es un deporte inclusivo que ayuda a mejorar trastornos mentales en niños y jóvenes.
Felicidad y paz interior es lo que experimenta el abogado Eduardo Campusano Altamirano, al momento de ajustar su casco, respirar hondo y empezar a pedalear. Aunque admite que al circular por las vías en su bicicleta, ha llegado a sentirse vulnerable, porque muchos de sus amigos ciclistas han sido atropellados por conductores que no respetan las señales de tránsito, ni la seguridad de estos deportistas.
En muchas ocasiones las mujeres enfrentan desafíos al momento de practicar algún tipo de deporte, este no es el caso de Janeth García Castro, una ciclista que ha recibido el apoyo incondicional de su esposo, quien le motiva a seguir adelante en cada entrenamiento. De igual manera, durante mucho tiempo ha compartido rutas con hombres que practican esta misma disciplina, de los cuales, ha recibido una buena aceptación.
Más que un deporte, el ciclismo se ha convertido en un refugio, un camino hacia la salud, el equilibrio y la libertad. Para estos ciclistas, cada pedaleo es una victoria silenciosa sobre el cuerpo y la mente.