Los hermanos Kevin y Kitzel Pérez Valdivia junto con los jóvenes Tobías Rafael Gadea, David Ortez Rivera y Rowan Ruíz fueron acusados por el presunto delito de exposición de personas al peligro. El Ministerio Público señala como víctimas a los agentes policiales Mijany Lucía Talavera, Erick José Vanegas Leiva, Aron Antonio Gaitán Alfaro, Ulises Alexander Sánchez Pérez y Juan José Gutiérrez Sánchez.

En la acusación se señala que los jóvenes protagonizaban una alteración al orden público en la que lanzaban piedras y portaban lanza morteros, por lo que habitantes de la zona del Portalito habrían llamado a la estación policial para que se presentasen al lugar.

El juicio en contra de estos jóvenes sustraídos de su jurisdicción, será el próximo primero de noviembre en Managua y la juez mantiene la medida de prisión preventiva, según informó Delia a Valdivia, madre de los hermanos Kevin y Kitzel Pérez, cuyo padre Mathil Alexander Pérez también enfrenta un proceso judicial acusado de varios delitos, entre ellos terrorismo y crimen organizado, después de su activa participación en las protestas antigubernamentales.

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Familiares aseguran que los jóvenes fueron secuestrados

Según familiares de los cinco procesados, ellos fueron secuestrados por la policía, que portando armas de fuego, la emprendieron en contra de los jóvenes desarmados que solo llevaban banderas azul y blanco.

Delia Valdivia sostuvo que en el momento que la policía secuestró a los actuales procesados, los golpearon salvajemente, pero ahora ellos son los acusados por exposición de personas al peligro.

El 29 de septiembre, día de los hechos, los acusados fueron trasladados a las celdas de la delegación policial Boris Vega de Estelí junto a otros jóvenes. Sin embargo, el lunes 01 de octubre fueron liberados algunos manifestantes mientras los cinco estudiantes fueron trasladados a la Dirección de Auxilio Judicial de Managua, conocida como El Chipote.