El municipio de Murra, del departamento de Nueva Segovia, fue el más golpeado en la región segoviana debido a que son más las personas que quedaron literalmente en la calle.
Aunque todavía hace falta verificar todas las afectaciones en la región, el padre Francisco Valdivia, director de Cáritas Diocesana de Estelí, informó que de forma preliminar pueden afirmar que Murra es el más golpeado, seguido de otros municipios como: Santa María, Wiwillí y El Jícaro, donde también hay familias damnificadas.
Los municipios de Cusmapa, San Juan de Río Coco y Telpaneca del departamento de Madriz también se encuentran entre los municipios afectados porque muchas familias tienen daños parciales y en algunos casos, totales de sus viviendas.
El padre Valdivia informó que ya entregaron alimentos y otros productos de suma necesidad a unas 300 familias de Murra y El Jícaro, pero las necesidades son muchas. "Nuestra Diócesis realmente tiene que ver, tiene que volcarse de alguna manera hacia esas comunidades, esos municipios nuestros que están afectados", instó el sacerdote.
El padre Francisco Valdivia hizo un llamado a seguir colaborando. Foto: Roberto Mora/Radio ABC StereoCáritas Diocesana tenía su campaña de recolecta por la Semana de la Caridad y pidieron la donación de alimentos a las personas de buena voluntad para ayudar a familias afectadas por el Covid-19. Los alimentos que donaron para ese fin son los que están sirviendo en las parroquias para socorrer también a los damnificados.
El padre Valdivia pidió a la población seguir entregando sus donaciones a Cáritas, sobre todo alimentos no perecederos, plástico negro o dinero que también servirá para la compra de alimentos, ya que las necesidades de las personas afectadas por los huracanes en esta zona son grandes.
"Entiendo que el golpe mayor lo vivieron los hermanos de la Costa Caribe Norte y que ese impacto fue brutal, que en esta emergencia hay una centralidad en esa zona pero es tanto el impacto en esa zona que se corre el riesgo de no voltear la mirada para esta zona y estos municipios, ver que aquí en el norte de Nicaragua, concretamente en Nueva Segovia y Madriz, tenemos afectaciones fuertes", destacó el padre Francisco Valdivia.
Muchas carreteras y caminos de acceso hacia las comunidades en municipios como Murra, Nueva Segovia, desaparecieron y en muchos de los casos solo se puede transitar a pie o en bestias.
Los daños en las vías son casi generalizados en la zona norte, donde afectó principalmente el huracán Iota, lo cual dificulta mucho a los organismos y funcionarios ingresar hasta para hacer las valoraciones reales de los daños.
Según el padre Francisco Valdivia, director de Cáritas Diocesana de Estelí, esa situación es otro de los efectos negativos que podrían tener consecuencias en el futuro, sumado a la pérdida de hasta el 80 por ciento de los cultivos de frijoles en muchos de estos municipios.
El maíz también sufrió daños por lo que quizás las siembras que están en las laderas son las únicas que podrían dar fruto y serviría por lo menos para que las familias de los productores tengan alimentos algunas semanas.
Los que han logrado obtener algunas cosechas e inclusive el café, están siendo trasladados en hombros desde algunas de estas zonas del norte porque los caminos no permiten el ingreso de vehículos ni de doble.
El gobierno dispondrá de recursos aportados por la comunidad internacional entre ellos el Banco Mundial, la Unión Europea y el Banco Interamericano, pero se desconoce el plan de apoyo inmediato a las familias afectadas y si habrá un plan emergente de restablecimiento del paso en las diferentes vías productivas.
