La iglesia católica celebró ayer a San Sebastián Mártir, quien fue un respetado militar y apreciado por un emperador romano, que desconocía su cualidad de cristiano.
Al enterarse el emperador Maximino lo obligó a escoger entre ser su soldado o seguir a Jesucristo. El santo escogió la milicia de Cristo, desairando a el Emperador, quien lo amenazó de muerte, por lo que lo ataron y le lanzaron una lluvia de flechas, de las cuales logró sobrevivir.
Ese sacrificio fue el que este lunes reconocieron los feligreses católicos del municipio de San Sebastián de Yalí en el departamento de Jinotega, donde se hizo la procesión y la santa eucarística presidida por el obispo Carlos Enrique Herrera.
Imagen de San Sebastián recorrió las calles del municipio. Foto: Cortesía
A través de un bando municipal, la alcaldía de Yalí declaró asueto para que la población participara de las actividades en honor a su santo patrono.
Las celebraciones religiosas iniciaron la semana pasada e incluyeron misas y vigilias. A su vez, se desarrollan eventos culturales y gastronómicos.