Para el abogado Harold Ramírez, defensor de Walter Feliciano Reyes Dávila, de 30 años, alias El Diablo, su representado solo se defendió de la agresión de la víctima, don Emiliano Arauz Guido, de 70 años, sin intención de matarlo.
El crimen tuvo lugar el domingo 22 de septiembre del presente año por las cercanías de la pulpería Los Coquitos en el sector de La Chiriza, al suroeste de la ciudad de Estelí, después de que el ahora fallecido supuestamente le lanzara piedras con una hulera al acusado.
Walter es acusado de haber privado la vida a don Emiliano, quien era recolector de desechos para reciclar. El anciano recibió tres puñaladas en el pecho, según acusación de la fiscalía.
El supuesto autor del delito, quien al parecer es adicto a la inhalación de pegamentos y otras sustancias alucinógenas, después de cometer el crimen huyó, pero la policía horas más tarde logró dar con su ubicación y captura en su vivienda en el barrio William Fonseca.
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Por este caso ya se llevó a cabo la apertura del juicio y durante el inicio del mismo, tanto la parte acusadora como defensora, realizaron sus respectivos alegatos, pero posteriormente se suspendió y se programó la continuidad para el próximo 5 de diciembre.
El abogado Ramírez lamentó la pérdida de la vida del anciano Emiliano Arauz Guido, pero dijo que al concluir el juicio espera que su defendido obtenga un fallo a su favor.
"Nosotros hemos planteado como teoría del caso a favor de mi representado que existió una provocación por parte de la víctima y producto de eso mi representado actuó en defensa, no con la intención de querer privarle la vida, pero por la provocación y las agresiones ilegítimas desencadena que mi representado le prive de la vida a la víctima", expresó el abogado defensor Harold Ramírez.
