Locales/Yessenia Centeno
La indiferencia que mostró Ruth Petronila Borda Poveda, de 22 años, durante la audiencia preliminar, se convirtió en llanto de la joven madre acusada por la fiscalía de Estelí de matar a su hijo de dos años de edad, el 24 de febrero del presente año.
Según la acusación, la muerte del niño presuntamente fue provocada por las golpizas propinadas por su madre. Dicho maltrato lo recibía en una humilde vivienda ubicada en la comunidad La Perla en la sub zona de Miraflor, jurisdicción del municipio de Estelí.
La fiscalía señala que el día del hecho la acusada presuntamente habría golpeado salvajemente al niño, quien también fue estrellado contra los adoquines que tienen como piso en su casa, y producto de esa paliza el niño comenzó a padecer de fuertes dolores por lo que fue llevado hasta el siguiente día al hospital San Juan de Dios donde falleció
Durante la audiencia inicial realizada la mañana de este jueves, la acusada Ruth Petronila Borda Poveda se hizo acompañar de un abogado particular para responder por el delito de parricidio que le imputa el Ministerio Publico y donde el principal testigo es el padrastro de la víctima, Elder José Castillo.
La fiscal auxiliar Yaneris Cruz Escoto, presentó a la juez de distrito penal de audiencias en Estelí doctora Alma Pino Irías, los testigos en su mayoría habitantes de la comunidad Las Perla, el peritaje realizado por investigadores policiales y el dictamen de la médico forense que evidencia las lesiones en el cuerpecito de la víctima.
La defensa a cargo del abogado Juan Joel Pérez Acuña pidió a la juez un cambio en la medida cautelar porque su clienta está embarazada.
“Mi representada está embarazada, tiene tres meses de gestación y por eso estamos solicitando el cambio de medidas cautelares” sostuvo el abogado defensor Juan Joel Pérez.
