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Niño de 13 años grave por agresión de padrastro

Niño de 13 años agredido por su padrastro sigue grave en un hospital capitalino. El hombre acusa a dos menores de supuestamente intentar abusar de su hija de ocho años.


Periodista Roberto Mora Cárcamo
28-Agosto-2015
Estelí-Nicaragua

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Un charco de sangre quedó en el aposento de una humilde vivienda del barrio El Centenario de la ciudad de Estelí, donde fueron agredidos un adolescente de 15 años y un niño de 13 años por su propio padrastro.

Hasta la tarde de este jueves, el niño de 13 años seguía grave en el Hospital Lenín Fonseca de Managua. 

El presunto agresor es Emir Rubio Blandón, de 40 años de edad, padrastro de los dos menores, quienes el día de la agresión regresaban junto a su mamá a la casa donde ocurrieron los hechos.

La comisionada Carmen Rocha, jefa de la Comisaría de la Mujer, Niñez y Adolescencia de la policía de Estelí informó que el presunto agresor había denunciado en semanas anteriores a sus hijastros por haber presuntamente violado a su hija de 8 años.

Sin embargo, la Comisaría hizo las investigaciones donde el dictamen de la médico forense relata que no ha habido ningún tipo de violación y la psicóloga tampoco encontró indicios de que haya abuso alguno contra la niña.

Pese a los resultados, el hombre se empecinó en que sus hijastros habían abusado de la niña y exigía la detención de los mismos, posiblemente porque no los quería viviendo junto a ellos, según las autoridades policiales.

Ante esa situación y por la intervención del Ministerio de la Familia se había decidido que los dos menores estarían viviendo con una tía materna hasta este miércoles cuando por decisión de su madre, regresarían a su lado en la casa del barrio El Centenario de Estelí donde tenían tres días de habitar. Fue ese mismo día que ocurrieron los hechos. 

“Los chavalos no estaban viviendo con la mamá pero ese día llegaron con ella y como él (el padrastro) no los quiere, aparentemente los golpeó un palo a los chavalos”, expresó la comisionada Rocha. 

El adolescente de 15 años salió de la casa corriendo ensangrentado para encontrarse con su mamá que regresaba de hacer un mandado cuando gritó que su hermanito estaba muerto porque pensó que eso había sucedido. 

El menor de 13 años fue llevado al Hospital San Juan de Dios de Estelí, donde verificaron que su estado era delicado y debía ser trasladado a la capital.

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