La joven Irma Yaritza Huete Iglesia, de 25 años de edad, era originaria de la comunidad Potosí, del municipio de Quilalí, departamento de Nueva Segovia, pero tenía 4 años de vivir en Ocotal; ella falleció ahogada cuando intentaba cruzar el Río Bravo, en la frontera entre México y Estados Unidos. Irma viajaba junto a su hermano y su hija de 4 años de edad, él logró cruzar, pero ella falleció y la niña está desaparecida.
En el grupo de migrantes donde viajaba Irma, eran 98 personas; 80 nicaragüenses y 18 de nacionalidad cubana, informó una nicaragüense, de 34 años de edad, quien vivió de cerca la muerte y viajaba en ese mismo grupo.
La mujer de 34 años es originaria de Nueva Segovia y según explicó, en el largo camino logró hacerse amiga de Irma y su hija, por lo que cuando podían compartían sus alimentos, oraban y hasta leían juntas la Biblia.
La emigrante, relató que la tragedia sucedió el martes 17 de mayo, pues ellos llegaron al sector de Piedras Negras a eso de las 9 de la noche, pero fue hasta las 11 que los coyotes decidieron cruzarlos.
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"Nos metimos al río, Yaritza venía conmigo ella traía las maletas y el hermano de ella cargaba a la niña en los hombros (...) Todos veníamos como en cadena, pero como a diez metros de llegar a tierras estadounidenses, el río se puso muy fuerte, nos empezó a llevar, el agua nos llegó al cuello y empezó aquella angustia", dijo afectada la nicaragüense.
Además, agregó que "la gente gritaba, pedía ayuda, y en aquella pesadilla. Fue en ese momento el hermano de Yaritza sintió que se ahogaba y ya no no tuvo fuerza y soltó a la niña. La niña con la mamá se fueron con la corriente del río. La gente nos alaba y nos hundía, se me guindó de los hombros, me hundieron a la profundidad, sentí que me ahogaba, pero logré flotar".
La segoviana expresó que luego que logró salir del río, empezaron a buscar a Irma Yaritza y su hija, pero no se supo nada más, hasta la mañana de ayer jueves, que ella salió de inmigración y conoció sobre el fallecimiento de su compañera de viaje.
La compatriota indicó que anteriormente ellos habían tenido un accidente mientras viajaban en un vehículo pesado, además, se mostró conmocionada puesto que tenía la esperanza de que Irma Yaritza se encontrara en México. La nicaragüense, llorando hizo el llamado a la población sobre el riesgo que implica viajar hacia los Estados Unidos de Norteamérica.
