Los pronósticos del clima parecen favorecer a los productores que con anticipación han comenzado a preparar las tierras que utilizarán para la siembra del ciclo agrícola de primera, que normalmente inicia en el mes de mayo con la caída de las primeras lluvias que marcan el inicio del invierno.
Santos Rodríguez, de la comunidad Rodeo de Pire, en el municipio de Condega, departamento de Estelí, tiene su fe puesta en Dios y confía en que los pronósticos de los especialistas en agrometeorología puedan cumplirse y así tener buenas cosechas.
De manera personal, Santos Rodríguez se ha propuesto sembrar dos manzanas de tierra, entre maíz y frijoles, para garantizar la alimentación de su familia, así mismo, generar algunos ingresos económicos si el invierno es mejor que en los dos últimos dos años.
Otro de los agricultores que espera con ansias el invierno, es Bilomar Alfaro, de la comunidad La Pava, en el municipio de Pueblo Nuevo, Estelí, ya que las lluvias representan la oportunidad de tener alimentos, y aunque ha tenido por costumbre sembrar en seco en los últimos días de abril, esta vez él esperará a que se establezca el invierno.
Falta poco para que inicie el ciclo de primera. Foto: Archivo/Radio ABC StereoLos productores deberán de ser prudentes para el establecimiento de cultivos del próximo ciclo agrícola de primera, debido a la falta de agua en los pozos, ríos y otras fuentes, las cuales han disminuido su caudal, así como para enfrentar el estrés hídrico que puedan tener los cultivos.
El otro problema al que pueden enfrentarse los productores, es que las semillas que tiren al suelo se deshidraten por las altas temperaturas o sufran los efectos de las plagas, aseguró el ingeniero Pablo Mairena, experto en agricultura sostenible.
El ingeniero Mairena dijo que, con la variabilidad climática, no se puede arriesgar semilla, ni recursos económicos sembrando en seco.
"Ante la alternativa de sembrar en seco, para aprovechar las primeras lluvias del invierno, es necesario que el productor haga un proceso de curado a la semilla, para evitar que las plagas del suelo puedan deteriorar el grano. Nosotros recomendamos que no arriesguen toda la semilla, que dejen un porcentaje en resguardo en sus bodegas, porque no sabemos cómo se va a comportar el invierno", indica el ingeniero Mairena.
