A lo largo de los años se ha hecho tradicional en Ocotal ver a varias personas llegar con leña desde Mozonte, montadas en sus burros e incluso con cargas al hombro, para dar un respiro económico a sus familias, sin embargo, este sector económico también se ha visto afectado.
Doña Noelia Díaz camina un estimado de dos a tres horas, una vez a la semana, desde la comunidad El Quebracho en Mozonte hasta la ciudad de Ocotal para dejar dos o tres cargas de leña, valoradas entre 80 y 120 córdobas, sin embargo, ella asegura que actualmente la leña ha escaseado.
La señora indicó que antes llegaba más seguido a la ciudad pero ahora la situación se ha vuelto más crítica. "La leña está escasa, para poder venderla tenemos que ir largo a buscarla, ahora yo solo vengo una vez a la semana a la ciudad porque ya no hay, con costo ajustamos para comprar algo, en el invierno todo se nos secó, Dios es el que nos da la fuerza para poder mantenernos", expresó doña Noelia.
Por su parte, Santos Nicodemo López, también originario de Mozonte, refirió que la escasez de leña es pareja en toda la zona de Nueva Segovia, donde tienen que viajar hasta otras comunidades para lograr juntar una carga de leña. "Uno vende la leña para venderla en Ocotal y poder comprar algunas cositas", comentó Santos Nicodemo.
Generalmente las personas que se dedican a este trabajo también laboran en las actividades agrícolas y vender leña les ayuda a sustentar los gastos de sus familias. Santos Nicodemo agregó que las personas tienen que tomar conciencia ante el despale indiscriminado, pues el cambio climático drástico de los últimos años ha sido a causa del hombre.
"Están destruyendo el bosque, sabemos que si corta un árbol debemos sembrar dos, pero no hay conciencia sobre eso, se está destruyendo el bosque y nadie siembra", lamentó Santos Nicodemo.
