Antecedentes de ansiedad, estrés, desequilibrios químicos en el cerebro, así como una lesión cerebral traumática y violencia psicológica son solo algunos de los factores que pueden llevar al ser humano a sufrir trastornos mentales.
Cualquiera de estos factores pudo haber influido en la vida de una joven que deambula por las calles de Condega, en el departamento de Estelí, donde las aceras de las casas se convierten en su cama y las palmas de su mano en un plato, pues es donde sostiene una tortilla con frijoles y arroz que le pueden regalar en ocasiones personas caritativas.
El nombre exacto y edad se desconocen, aparenta unos 23 años de edad. Los habitantes de ese poblado no saben cómo llegó, tampoco, cómo se llama, pero siempre está sonriendo y llamando a su mamá.
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La mayor parte del tiempo la joven permanece en la terminal de buses de ese municipio y la preocupación de quienes trabajan en ese lugar es que alguien pueda hacerle daño o pueda sufrir algún accidente de tránsito, como ha ocurrido con otros enfermos mentales.
Doña Sorayda Paiza, quien tiene una venta de comidas, es una de las buenas samaritanas que ha suplido algunas necesidades de alimentos de esta joven mujer, pues según ella, no es una mujer agresiva, sin embargo, camina desnuda y puede estar expuesta a ser víctima de cualquier abuso.
El interés de doña Sorayda es poder encontrar a los familiares de la joven, quien según le han informado, podría ser originaria de la comunidad San Nicolás en el municipio de Jalapa, en el departamento de Nueva Segovia.
"La joven está en la COTRAN de Condega, ella se desnuda delante de la gente, tiene problemas mentales, le pido a los familiares que por favor vengan a buscarla, hemos llamado a la policía, al Ministerio de Salud para ver qué pueden hacer, ella menciona que tiene dos niños", expresó doña Sorayda.
