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Departamental

Familias de Quilalí y El Jícaro evacuadas por Eta

Estos municipios segovianos no escaparon del paso de Eta, varias familias fueron evacuadas o por su propia cuenta decidieron buscar lugares más seguros. Desbordamientos de ríos y casas anegadas se reportan en ambas zonas.

Doña Luisa Bellorin, de la comunidad Las Playitas, Quilalí, junto a su vivienda colapsada. Foto: Cortesía
Doña Luisa Bellorin, de la comunidad Las Playitas, Quilalí, junto a su vivienda colapsada. Foto: Cortesía

Periodista Famnuel Úbeda
5-Noviembre-2020
Nueva Segovia-Nicaragua

El cerro La Jumuyca en El Jícaro, departamento de Nueva Segovia, es considerado como área de riesgo a derrumbes por la saturación de agua en el suelo, lo que  obligó a varias familias de comunidades cercanas a tomar la decisión de autoevacuarse ante las incesantes lluvias registradas durante todo el día y noche de este miércoles.

San José de Gualí y San Antonio de Gualí son dos de las comunidades donde más de 20 familias tomaron la decisión de salir de sus casas a lugares más seguros, con la intención de resguardar sus vidas, puesto que en días recientes estas zonas se vieron afectadas con derrumbes, pérdidas de cultivos y el colapso una vivienda.

El líder comunitario Anastasio Hernández Vásquez dijo que la autoevacuación fue temporal hacia casas particulares de familiares cercanos, así mismo informó que producto de las lluvias, una de las paredes de la vivienda del señor Jairo José Madariaga, que está construida de adobe y donde habitan tres adultos y un niño, se socavó.

Hernández agregó que gracias a Dios no se reportaron hasta la tarde de este miércoles daños que lamentar tras el paso de la tormenta Eta por la zona de La Segovia.

En tanto, don Leonel López, presidente departamental de la Unión Nacional de Agricultores en Nueva Segovia (UNAG), informó que los que sí han quedado afectado son los caminos troncales de las comunidades cercanas a Susucayán, de igual manera daños en los cultivos de frijol en gran parte de los municipios, los cuales serán contabilizados en próximos días.

Quilalí, Nueva Segovia. Foto: Cortesía Maynor Castro

Familias de dos barrios Quilalí fueron evacuadas

Varias familias de La Pimienta y Leonardo González, que se ubican sobre las riberas del Río Jícaro que atraviesa el municipio de Quilalí, en el departamento de Nueva Segovia, fueron evacuadas de sus viviendas tras el desbordamiento de ese afluente que se une al Río Coco.

Las familias fueron auxiliadas por el Comité Municipal para la Prevención, Mitigación y Atención a Desastres (COMUPRED), instancia de primera respuesta que fue activada una vez se conoció sobre las afectaciones posibles de la tormenta tropical Eta en ese territorio segoviano, pero que posteriormente se  degradó a depresión tropical, según el Centro Nacional de Huracanes de los Estados Unidos.

Las personas evacuadas fueron llevadas a casas de familiares que residen en barrios altos y seguros del casco urbano, informó don Walter Vásquez, uno de los ciudadanos que trabajó como voluntario en la reubicación de los afectados.

Vásquez agregó que ante esta situación de emergencia, el gobierno local e instituciones del Estado, que forman parte del COMUPRED, dispusieron de todos los medios de transporte para el traslado de las familias de los barrios anegados.

Otras de las zonas que resultaron afectadas por el desbordamiento del río fueron El Granero y Las Playitas, donde algunas áreas productivas de hortalizas resultaron afectadas, informó doña Danelia Valenzuela, quien está dedicada a la agricultura.

En el Sector No. 08 de San Bartolo dos viviendas que estaban construidas de adobe colapsaron por saturación de agua en el suelo, informó doña Juana Dávila Fuentes, habitante de ese asentamiento poblacional.

Hasta antes del cierre de nuestra edición intentamos comunicarnos con el alcalde de ese municipio, Marvin Rodríguez, así como con familias que resultaron afectadas, sin embargo, por problemas de red en el servicio telefónico no fue posible, por lo que estamos a la espera de los reportes oficiales que presente el COMUPRED en Quilalí.


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