A nivel mundial el turismo y restaurantes han sido los más afectados debido a las consecuencias del confinamiento y las medidas de protección ejercidas por las personas y autoridades para evitar contagios por el coronavirus.
En El Jícaro, municipio del departamento de Nueva Segovia, Gissel Ortez funge como presidenta de la Cooperativa de Servicios Turísticos COODETUR R.L., organización que aglutina a 17 asociados micro empresarios de la región norte.
Ortez aseguró que el centro turístico "Aguas Termales Don Alfonso", ubicado en El Jícaro, ha funcionado normalmente desde el inicio de la pandemia puesto que por las altas temperaturas en sus aguas, se considera un foco no contagioso de la enfermedad.
Nido del Pájaro es un restaurante que cerró temporalmente pero nuevamente abrió sus puertas. Foto: CortesíaEn tanto, el restaurante "Nido del Pájaro", con más de cinco años de atender en el sector de Susucayán, tuvo que cerrar sus puertas durante dos meses, pero desde hace aproximadamente un mes volvió a brindar atención ante la demanda de sus clientes, según informó Ortez, propietaria del local.
Por el momento, los propietarios de negocios turísticos han optado por tomar todas las medidas de prevención para evitar la propagación del virus, enfatizó Ortez, quien indicó que en su restaurante mantienen alcohol gel al ingresar al local, los colaboradores usan las mascarillas y piden a los clientes que se laven las manos al ingresar al local y mantengan el distanciamiento social recomendado.
"Siempre vienen clientes que son incrédulos de la pandemia, entonces tenés que lidiar con ese tipo de clientes para que cumplan con las medidas", comentó Ortez, quien considera que "en el norte del país las personas siempre visitan los lugares turísticos y se mantienen las ventas".
