Era la una de la tarde del viernes y Jesús Alberto Talavera, un joven indigente e inhalante de pegamento, se quedó profundamente dormido en una de las calles próximas a la Escuela Villa Esperanza, donde le rociaron sobre sus piernas ácido de batería.
El ácido provocó quemaduras de segundo grado y sangrado que lo hicieron pegar gritos de auxilio, por lo que algunos ciudadanos lo auxiliaron echándole agua sobre las heridas y llamaron a miembros de la Cruz Roja, que de inmediato se movilizaron para atenderlo y los trasladaron al Hospital Escuela San Juan de Dios de la ciudad de Estelí.
Gustavo Olivas, oficial de Cruz Roja, manifestó que previo al traslado, decidieron colocarles comprensas de agua fría, que es lo más indicado ante este tipo de accidentes por ácidos o químicos.
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Jesús Alberto fue atendido y trasladado por miembros de la Cruz Roja. Foto: Famnuel Úbeda/Radio ABC Stereo
Hasta ahora se desconoce quién o quienes hayan sido los autores de este hecho en contra de Jesús Alberto, pero algunos vecinos esperan que las autoridades policiales puedan actuar de oficio para investigar lo sucedido.
Hace unos años ocurrió un hecho similar, cuando un joven de nombre Junerling, quien también era indigente e inhalante de pega, murió quemado aparentemente con gasolina en el sector de la estación Zeta Gas de la ciudad de Estelí, pero nunca se esclareció el crimen.
A través de nuestras plataformas digitales también se conoció que la semana anterior un tomador consuetudinario resultó quemado de forma similar en el sector del monumento al Centenario, salida a La Concordia, Jinotega. La víctima, identificada como Julio, sufrió graves quemaduras en uno de sus pies.
