Javier Mascherano marcó al fin su primer gol con la camiseta del Barcelona gracias al lanzamiento de un penalti en el partido de LaLiga contra Osasuna.
Con el partido encarrilado, 5-1 hasta aquel momento, el Jefesito buscaba como loco su gol, el primero con el Barça, como ya hizo en otras ocasiones, aunque esta vez al fin lo logró.
Un penalti necesitó el argentino para romper una maldición que acumulaba 319 partidos de sequía goleara. Demasiado, incluso para un defensor, y Mascherano seguramente querría sacarse este peso de encima antes de abandonar el club catalán.