El terror por una supuesta cacería de niños y niñas de parte de funcionarios del Ministerio de la Familia Adolescencia y Niñez (Mifam), se adueñó de la tranquilidad de los habitantes de la comunidad de Colocondo del municipio de San Juan de Limay, departamento de Estelí.
Colocondo está ubicado a unos 14 kilómetros de la cabecera departamental donde solo se puede llegar en vehículo de doble tracción y aunque cuenta con un exponente turístico como el salto de Colocondo, la mayoría de sus habitantes se caracterizan por vivir en extrema pobreza.
Pascual Gómez, es un campesino que quedó a cargo de sus tres hijos desde que su esposa lo abandonó hace más de un año.
Sus dos hijos menores, Darwin Exequiel y Melvin Osiel Gómez Gómez, de 13 y 12 años respectivamente, fueron buscados en su centro de de estudio por técnicos del Ministerio de la Familia de Estelí.
Ese mismo día le dijeron en la comunidad de Paso Redondo: "El Ministerio de la Familia anda detrás de tus dos hijos menores", relató muy angustiado Pascual Gómez, quien ante el temor de perder a sus muchachos decidió hacer la denuncia pública.
Una versión similar brindó Ana Francisca Gómez, quien afirmó que fue una de las maestras de su hijo de 7 años, quien la alertó de que su chavalo también estaba en la mira de los funcionarios del Ministerio de la Familia.
Noticias ABC, buscó la versión de la Delegada de Mifan en Estelí, Alba Nidia Dávila y pese a que la solicitud se hizo por escrito, hasta el día de esta publicación no se contactó con nuestro equipo periodístico.
Este caso no solo afectó a familias estelianas, fue el inicio de varias denuncias principalmente de madres de escasos recursos económicos relatando la misma historia.
Los niños despojados de su familia
Ana Francisca ya había pasado la amarga experiencia de perder a su nieta Freydell Monserrat Castillo, cuando estaba bajo el cuido de su vecina Dominga Rodríguez.
Para esta mujer de aspecto humilde había un interés especifico por los niños de la comunidad Colocondo " Yo creo que tienen algún contrato o negocio de andar vendiendo los niños", aseveró Ana Francisca, quien agregó que la misma maestra le advirtió que ella no respondería si un día cualquiera los del Ministerio de la Familia le "levantaban a su hijo".
Pero el caso más emblemático fue el que denunció primeramente el abogado Marlon Castillo, quien pedía la devolución de su nieta Freydell Monserrat Castillo Cruz, quien fue devuelta 10 meses después de haber sido sustraída de la casa de la vecina de su abuela materna que estaba a cargo temporalmente en la comunidad de Colocondo.
Relatan los familiares de Freydell, que el silencio de la noche fue roto por el ruido de una camioneta que llegó a eso de las 7 :00 pm del día 13 de Octubre de 2015, hasta la casa de Dominga Rodríguez, quien estaba a cargo del cuido de la niña de 13 meses de edad.
"Los funcionarios le advirtieron a Dominga que si ella no entregaba a la niña, regresarían al día siguiente con la policía" nos dijo entre lagrimas, Ana Francisca Gómez.
Así comenzó un largo calvario y meses de incertidumbre por el paradero de la niña Freydell, de quien solo se supo que dos meses después fue dada en adopción a una pareja de extranjeros y luego declarada en abandono por el juez Carlos Antonio Espinoza de Jinotepe, Carazo.
El código de la familia establece que debe crearse el Consejo de Adopción para analizar las condiciones del niño o niña, para que pueda ser entregada a una pareja nacional o extranjera que cumpla los requisitos.
El artículo 256 del Código de la Familia reza que durante el proceso Pueden oponerse a la adopción:
a) El padre o la madre del niño, niña o adolescente que se
quiere adoptar.
b) Las y los abuelos paternos y maternos y en su defecto,
las y los tíos o hermanos y hermanas mayores de edad
en los casos establecidos en este Código.
El asesor Legal en Estelí, Alberto Rosales Mondragón, dijo que en el caso de la niña Freydell no hubo una sola notificación a la mamá y al papá. "El proceso judicial se hizo fuera de jurisdicción en clara evidencia de que no había interés de que la familia supiera lo que estaba ocurriendo con la niña", dijo.
Abandonaron temporalmente las clases por miedo
Las anomalías cometidas por la institución del gobierno que habían salido a la luz pública, es lo que causó temor en los habitantes de Colocondo que no podían ocultar su miedo ante la presencia de extraños en su zona.
En nuestra visita a la escuela de la comunidad Colocondo, una de las maestras expresó que no le preguntáramos nada porque no quería perder su trabajo.
Por su parte, una madre comentó que por esa zona anduvieron nuevamente funcionarios de Mifamilia buscando a más niños, por lo que algunos estudiantes faltaron unos días a sus clases.
Solo por oír el ruido del vehículo en el que llegaba nuestro equipo, se acercaron a la escuela los padres y madres de familias en busca de sus hijos e hijas, y aunque no dieron declaraciones, era evidente que se imaginaban lo peor ante la presencia de personas ajenas a la localidad.
El caso trascendió nuestras fronteras, la agencia internacional Reuter y la cadena internacional CNN abordaron la noticia que la mayoría de noticieros de radio, televisión y diario de Nicaragua decidieron callar.
A Janeth Nohemy Calderón Mercado originaria de Rosita, en el Triángulo Minero, supuestamente, la despojaron de dos hijos, mientras que Jennifer Tatiana Zeledón Rizo de Estelí, pedía que le devolvieran a su niño Jocksan.
Así mismo desde que a Sidney Romero la señalaron de maltrato no supo más de su niña Stefani, por su parte el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) que destapó estas irregularidades informó que documentó al menos 6 casos similares.
Además la iglesia católica se pronunció y a través del obispo de la diócesis de Estelí, monseñor Juan Abelardo Mata dijo que si no ha sido por los mismos familiares y la presión social, los casos hubieran quedado impunes.
"Nos extraña tanto silencio, porque oficialmente no se dice: ni si ni no". Opinó Mata.
Pero también hay voces como la de Martha Munguía del organismo Acción Ya que se pregunta, ¿Qué hay detrás de esta presunta corrupción?.
" Yo creo que había o hay una red de corrupción en las instituciones vinculadas con estos aspectos, ha sido un asunto inconcebible, no le podes quitar un niño a su madre sin haberlo declarado en abandono, es otra forma de violentar los derechos de las mujeres(?.) son madres en situación de pobreza, es decir es delito en este país ser pobre".
El gobierno nunca aclaró estas anomalía, pero fue publicada en la Gaceta la renuncia de la viceministra de Mifan Xiomara Bello Noguera y se confirmó la separación de su cargo de Katia Zelda Jaentschke Acevedo, directora general de Adopciones del Ministerio de Familia y días después, todos los niños fueron separados de los padres adoptivos extranjeros y devuelto a los padres biológicos.
La última en ser devuelta, fue la niña Freydell Monserrat Castillo Cruz, nieta del abogado Marlon Castillo quien incluso fue despedido como asesor de Enacal en Estelí por reclamar al Estado que se la devolvieran.
Para Castillo, la devolución de su nieta ha sido el último de los casos que a su criterio han sido "aberrantes" en la sustracción de niños que obliga a la familia a pasar tribulaciones. Consideró que en Estelí no se ha hecho justicia. "La que ordenó la sustracción de la niña, todavía pulula en caballo blanco, es un peligro para la niñez tener a una persona como la delegada Alba Nidia Dávila".
Y al final, el Estado nunca aclaró que había detrás de estas irregularidades y si en realidad solamente se ameritaba del despido de los funcionarios involucrados para que los niños puedan dormir tranquilos al lado de sus madres o familiares de sangre.
El caso trascendió nuestras fronteras, la agencia internacional Reuter y la cadena internacional CNN abordaron la noticia que la mayoría de noticieros de radio, televisión y diario de Nicaragua decidieron callar.
