Managua, (EFE) | Un bebé que fue secuestrado hace 39 días en Nicaragua fue encontrado enfermo en una vivienda en Managua, donde vivía con su supuesta raptora, informó hoy la Policía Nacional.
El niño fue encontrado el viernes en “condiciones de abandono, con neumonía y anemia”, dio a conocer una portavoz del hospital estatal Aldo Chavarría.
El bebé, de un mes y diez días, había nacido hacía 15 horas cuando una mujer se hizo pasar por enfermera para secuestrarlo el pasado 1 de junio, según las autoridades.
Tras realizarle estudios de ADN, el niño fue entregado a sus padres la noche de este sábado, en un hospital de Managua, tras confirmar que se trataba del mismo recién nacido que era buscado.
“Tengo en mis manos las pruebas de ADN, que comprueban que el niño es hijo de la pareja, además tiene un lunar igual al de sus hermanitos mayores”, dijo la ministra de la Familia, Marcia Ramírez, durante la entrega.
“El corazón se me va a salir, no tengo palabras por la emoción”, dijo la mamá, Marianela Flores Maldonado, al recibir a su hijo.
Durante el hallazgo del bebé, la Policía arrestó a Wanki Tani Monge Altamirano, de 30 años de edad, como sospechosa de ser la mujer que secuestró al bebé, a su cónyuge Tupac Amaru Murillo, de 35 años, y a su hermana, Julia Antonia Monge Altamirano, de 43 años.
Durante 39 días, la Policía Nacional investigó el caso en al menos seis departamentos (provincias) del Pacífico, centro y norte de Nicaragua, así como en Honduras y Costa Rica, afirmó el segundo jefe de la institución, Francisco Díaz.
El bebé, que se llamará igual que su padre, Azael Orozco, permanecerá hospitalizado, bajo el cuido de su mamá, mientras recupera su salud, puntualizaron las autoridades.
