La lluvia acompañada de fuertes vientos, registrada la tarde del pasado lunes 7 de julio causó afectaciones en el municipio de Quilalí, Nueva Segovia, tanto en el casco urbano como en comunidades rurales.
Entre los principales daños reportados están: la caída de cables del tendido eléctrico, de telefonía y televisión por cable, así como el desprendimiento de techos en varias viviendas.
En el barrio Juan Talavera, el viento arrancó parte del zinc de la vivienda de Frederman Alvarado.
Asimismo, un árbol fue derribado por la fuerza del viento y cayó sobre el muro perimetral de un beneficio de café, propiedad de la cooperativa 20 de Abril, provocando daños materiales en la infraestructura ubicada en el barrio Linda Vista.
En la zona rural, también se reportaron afectaciones considerables. En la comunidad de Teocintal Arriba, una vivienda propiedad del ciudadano Francisco García perdió su techo.
Situaciones similares se vivieron en las comunidades de La Luz y Caulatú, donde otras viviendas también sufrieron daños estructurales debido a la fuerza del viento. De igual forma, se conoció que hubo cortes de energía y caminos obstruidos, lo que ha dificultado la circulación vehicular en varios tramos.
También fue afectada la Oficina de Cedulación, por la fuerza del viento.
Las autoridades locales aún no han dado a conocer un informe oficial de los daños, pero brigadas comunitarias y vecinos han iniciado labores de limpieza y evaluación de las afectaciones.
Además de Quilalí, también se reportaron condiciones climáticas similares en los municipios de El Jícaro y Murra, donde las ráfagas de viento y las lluvias persistentes mantienen en alerta a los habitantes y autoridades locales.