La muerte de Henry Reyes Corrales, un nicaragüense de 44 años, en una celda de la Fuerza Pública en Pavas, Costa Rica, ha generado indignación y controversia.
Familiares de Reyes, indicaron que el hombre era originario de El Sauce, departamento de León, y viajó hace 20 años a Costa Rica para mejorar su vida.
Reyes Corrales fue arrestado el pasado 9 de febrero por presuntamente incumplir medidas de alejamiento, tras un delito de violencia doméstica.
Según informes de medios costarricenses , Reyes estuvo dentro de la celda tras recibir una brutal golpiza por varios oficiales.
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El Ministerio Público confirmó que nueve policías fueron detenidos en relación con el incidente. Sin embargo, en una audiencia celebrada ayer martes, cinco de ellos fueron liberados, mientras que cuatro permanecen bajo custodia mientras avanza la investigación.
La noticia de la liberación de los cinco oficiales ha generado fuertes críticas y ha levantado interrogantes sobre el curso de la investigación, mientras familiares y amigos de Reyes exigen justicia y esclarecimiento de lo sucedido.
El reto de la justicia costarricense es emprender una investigación exhaustiva y transparente para determinar las responsabilidades en la muerte de Henry Reyes Corrales.
