Freddy Vladimir Rugama Ruiz, de 48 años, fue asesinado en la comunidad La Flor, de San Sebastián de Yalí, Jinotega. La víctima fue atacada por sujetos desconocidos, quienes le propinaron al menos siete impactos de bala.
Su esposa e hija sospechan que el móvil del crimen fue el robo. El crimen ocurrió la noche del pasado martes, cuando Freddy regresaba a casa de sus familiares, pero fue sorprendido por individuos desconocidos que le arrebataron la vida.
María Antonia Rivera, esposa de Freddy, espera que la Policía Nacional dé captura a los responsables del crimen. Ella narró a Noticias ABC que, días antes de la tragedia, había conversado telefónicamente con Freddy sobre la compra de una camioneta para el trabajo en la finca, por lo que cree que personas escucharon esa conversación y lo atacaron para robarle.
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“A mi esposo lo mataron como si fuera un perro. Él tenía muchos proyectos y creo que nos escucharon cuando hablábamos, porque cuando lo recogieron no tenía ni su dinero ni su pistola”, relató María Antonia Rivera.
Freydell Rugama, hija de Freddy, mencionó que su padre había recibido amenazas de algunas personas que podrían haber planeado su asesinato, aunque también sospecha que el móvil fue el robo, pues él siempre manejaba dinero.
“Mi papá no se merecía eso, él era un hombre que se levantaba a las cuatro de la mañana a trabajar, como para que un maldito le hiciera eso”, expresó la hija de la víctima, con la voz entrecortada.
Freydell Rugama expresó que confían en Dios y en las autoridades, para que capturen a los asesinos y se les castigue con todo el peso de la ley.
La mañana del pasado jueves 6 de marzo los restos de Freddy fueron sepultados en el cementerio de la localidad.
