El amor, el cuidado y las enseñanzas de un padre son irremplazables en la vida de sus hijos e hijas. Pese a que haya mujeres que se vean obligadas a asumir los roles adjudicados culturalmente de mamá y papá, hay vínculos, experiencias y aprendizajes que los niños y niñas sólo pueden adquirir de una figura masculina, así lo explica la Unidad de Psiquiatría Infantil de Clínica Alemana.
En ausencia del padre, la madre podría cumplir con ciertas funciones de la figura paterna, pero también es importante que los niños puedan afianzar otros vínculos con figuras masculinas con quienes el niño o la niña se sientan seguros y queridos, puesto que ambos roles, tanto de mamá como de papá, son insustituibles.
Especialistas psiquiatras infanto-juveniles de la Clínica Universidad de los Andes, en Chile, explican que el papá ayuda a: "desarrollar una mayor autonomía e independencia, impulsar la diferenciación y la tipificación sexual, promover la adquisición de los valores sociales y el desarrollo moral".
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Mientras tanto, un estudio publicado por la Universidad La Sabana, de Colombia, explica que algunas de las características que se aportan a los hijos desde cada uno de los roles son, por ejemplo: "La figura materna aporta sensibilidad, empatía, ternura; y la paterna aporta seguridad, firmeza y proyección. Eso no significa que una mamá o un papá no puedan aportar las características del otro, pero sí tiende a desarrollarse de esta manera".
Por su parte, el psicólogo español Jesús Mora Mejía, radicado en Estelí, dijo en una entrevista brindada anteriormente a Noticias ABC que la figura paterna es bastante importante, "por no decir imprescindible". "La falta de un papá puede perjudicar al momento de definir la identidad de género, a la vez que, un referente masculino es un apoyo a la hora de tomar decisiones", señaló el especialista.
Además, según un análisis de la organización católica Caballeros de Colón, en Estados Unidos, un papá que desempeña debidamente y con amor ese rol, en conjunto con la labor de mamá, favorece de diversas maneras a sus hijos e hijas en factores como: mejores calificaciones escolares, economía más estable en el hogar, menos desordenes afectivos, disminuye incidencias delictivas, genera menos probabilidades de un embarazo adolescente, y contribuye a evitar que los hijos sean víctimas de distintos tipos de abuso.
