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Párroco de San José de Cusmapa y de Las Sabanas, cumple 50 años de sacerdocio

A 50 años de sacerdocio, y 77 de vida, el presbítero Celestino Sainz continúa lleno de ilusiones, servicio, fe y amor para la iglesia, en donde, además de sacerdote, es misionero.

50 años de fe, vocación y servicio. Foto: Cortesía/Radio ABC Stereo
50 años de fe, vocación y servicio. Foto: Cortesía/Radio ABC Stereo

Periodista Juan Francisco Dávila Matute
7-Enero-2022
Madriz-Nicaragua

Este jueves 6 de enero, Día de los tres Reyes Magos, cumplió 50 años de vida sacerdotal el presbítero Celestino Sainz, actual párroco de los templos católicos María Auxiliadora, de los municipios de San José de Cusmapa y Las Sabanas, departamento de Madriz, Diócesis de Estelí.

El religioso, de origen europeo, quien tiene unos 5 años de haber venido a Nicaragua, manifestó vía telefónica a Noticias ABC, que fue ordenado como sacerdote en Madrid, España, y desde entonces ha recorrido varios lugares cumpliendo misiones espirituales y sociales.  

Las muestras de aprecio y felicitaciones por parte de la feligresía católica, tanto del sector que pastorea, como de otras zonas, no se hicieron esperar, y a la vez le desean al sacerdote muchas bendiciones para que continúe con su labor misionera de la mano de Dios.

El presbítero Celestino Sainz, dijo que desde su arribo a este país centroamericano, solamente ha estado trabajando en los municipios de San José de Cusmapa y Las Sábanas, y que espera seguir cumpliendo con tareas asignadas, mientras Dios le de vida, fuerzas y sabiduría.

"A la vida sacerdotal le agrego lo de misionero, porque pertenezco a una congregación de misioneros que fundó San Antonio María Claret, que se llama: Misioneros Hijos del Inmaculado Corazón de María, dirigida al servicio de los más marginados; de llevar y dar la palabra a los más pobres; la dimensión misionera que te dice que no te instalas, que no te quedas en un sitio; acercarte al que sufre", manifestó Sainz.


Además, expresó que "A veces rotamos y vamos de un lado a otro según las necesidades de las Iglesias o de los puestos misioneros que tenemos como congregación".

"A pesar de tener ya 50 años como sacerdote, y 77 de vida, todavía no me falta la ilusión, tenemos proyectos de acueductos; de ermitas; de centro pastoral; buscar ayuda para financiar educación a estudiantes, todavía tenemos un montón de proyectos en la cabeza, que no creo que todos los podamos llevar a cabo quizá en el tiempo que me toca estar aquí", agregó el apreciado sacerdote.


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