Este 12 de agosto es celebrado el Día Internacional de la Juventud. Este 2020 según la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha servido para reflexionar el valor y desafíos, así como el de dar voz a las generaciones de futuro.
En Nicaragua esta fecha pasó desapercibida, sin embargo, la Ley 392 de Promoción Integral a la Juventud aprobada el 09 de mayo de 2001 y publicada en la Gaceta Diario Oficial el 04 de julio del mismo año, reconoce el valor que tiene la juventud en el desarrollo de la nación.
La misma ley considera jóvenes a todos los hombres y mujeres que hayan cumplido los 18 años y que sean menores de 30, pero también reconoce que el futuro del país necesita de su incorporación a las actividades productivas, económicas, sociales y políticas en condiciones que les permita aportar al desarrollo nacional, puesto que representan el 67 por ciento de la población de este país centroamericano.
Según el Artículo 21 de la misma ley, las y los jóvenes tienen derecho a formar asociaciones de carácter económico, empresarial, sindical, comunitario, cultural, estudiantil, deportivo, científico, de desarrollo y de cualquier otra índole que posibilite la integración de la juventud a la vida política, social y económica del país.
Dora Gámez, una joven esteliana, sin tener un puesto o cargo público ha conseguido con su voz y alianzas entre los mismos habitantes llevar el desarrollo a su barrio y entre esas obras está el proyecto de adoquinado, asesoría y asistencia legal a la niñez víctima de violencia y abuso, así como atender las necesidades de alimentos y medicamentos de familias en condición de vulnerabilidad.
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"Mi primera experiencia fue cuando me di mi Confirmación, mi promesa era dar Primera Comunión, de ahí empezó mi liderazgo desde mi religión católica, nadie para ese tiempo quería ser líder, me acuerdo que dije 'aquí estoy yo para apoyar a mi comunidad', es cierto que no soy una mujer con semejante capacidad educativa pero sí tengo el amor, el entusiasmo, el carisma, el deseo de ayudar a la gente que me necesita", relató Dora.
"Me quedé y empecé a apadrinar a los niños, a visitar a las familias, a conocer a cada uno de los miembros de mi comunidad, que necesitan y en que les puedo ayudar", sostuvo Dora, quien agregó que "he apoyado a que mi barrio se desarrolle en diferentes proyectos, he luchado en todos los cabildos, no es necesario tener dinero para ayudar a las personas".
Por su parte, Gustavo Bucardo, compositor, músico e intérprete esteliano, es otro líder que ha promovido campañas o proyectos sociales a favor de los necesitados, particularmente la niñez. Él asegura que es la juventud la que tiene el reto de aportar con sus ideas e iniciativas al desarrollo de la nación, razón por la que insta a otros a involucrarse en obras sociales. "Mi abuelita de chiquitos nos sentaba alrededor de ella y nos decía que 'el que no vive para servir, no sirve para vivir' y se me quedó", recordó Bucardo.
"En el servicio he encontrado mucho regocijo, mucha satisfacción, es importante que ese don del servicio lo practiquemos, los jóvenes son la fuerza activa, no son el futuro, son el presente, tiene ese fuego que nos impulsa a desarrollar proyectos", manifestó Buscardo, quien invita a los jóvenes a "despertar sus dones, talentos y sus los pongan al servicio de las personas, eso no va a ser un trabajo, sino un privilegio".
