Aproximadamente 33,5 millones de personas en EE.UU. han solicitado ayuda por desempleo durante las últimas siete semanas, desde que comenzó el brote del covid-19, según ha informado este jueves AP.
Esta cifra equivale a uno de cada cinco de los estadounidenses que estaban empleados en febrero, cuando la tasa de paro había alcanzado un 3,5%, el mínimo de 50 años. La semana pasada, casi 3,2 millones de trabajadores despedidos solicitaron estas ayudas.
Se pronostica que la tasa de desempleo alcanzará al menos el 16 %, la cifra más alta desde la Gran Depresión de 1929, y los economistas estiman que el mes pasado se perdieron 21 millones de empleos. De ser cierto, significaría que en un solo mes se ha desvanecido prácticamente todo el crecimiento del empleo de los 11 años desde que terminó la crisis financiera de 2008, subraya AP.
Al mismo tiempo, las cifras oficiales de las solicitudes de desempleo pueden ser inferiores a los números reales de despidos, ya que las encuestas sugieren que hasta 12 millones de trabajadores despedidos a mediados de abril no solicitaron ayudas de desempleo entonces.