Tal a como estaba previsto, ayer lunes dio por iniciado el juicio oral y público en contra de José Manuel Cruz Espinoza, de 37 años, quien está siendo acusado de acabar con la vida de su madre, la señora Domitila Espinoza Arteta, de 52 años, al propinarle golpes con una piedra en la cabeza.
En el inicio del juicio ventilado en el Juzgado Especializado en Violencia en Estelí, tanto el Ministerio Público como la defensoría, hicieron los primeros alegatos, pero luego se suspendió el proceso, fijando la continuidad del mismo para el próximo 25 de marzo.
El caso de parricidio que causó repudio y consternación, ocurrió la mañana del 29 de enero del presente año en la comunidad La Florida, a varios kilómetros al noroeste de la ciudad de Estelí, colindante con El Regadío.
El acusado, quien guarda prisión en el Sistema Penitenciario de Estelí y quien al parecer mató a su madre porque no le dio de comer cuando él se lo pidió, supuestamente tiene problemas mentales y ya ha había sido procesado por otras causas penales cometidas en fechas anteriores.
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En la audiencia inicial, la representante del Ministerio Público, María Elena Carvajal, ofreció para el juicio el testimonio de 7 personas, entre ellas el del padre del acusado y esposo de la víctima, Santos Cruz, quien fue el primero en darse cuenta del suceso.
"Dice que no se arrepiente de haberlo hecho, yo le digo que Dios le ayude, ya lo pusimos en manos de Dios y Él va a disponer de su vida, yo soy cristiano y no puedo guardar rencor pero esto es lo más doloroso qué hay en la vida", manifestó don Santos Cruz hace algunos días.
Otra de las pruebas fundamentales que acreditarían a José Manuel Cruz Espinoza como el único responsable del crimen contra su progenitora, es la de un oficial de policía que lo atendió cuando el señalado llegó a entregarse a la delegación y le narró lo que había hecho.
