NOTICIA

Departamental

Pobreza y desempleo las obliga a salir del país

Ante la falta de oportunidades en el campo, muchas mujeres de la comunidad El Coco, en Quilalí, Nueva Segovia, optan por dejar a sus familias y buscar oportunidades en Costa Rica y El Salvador.


Periodista Famnuel Úbeda
10-Febrero-2020
Nueva Segovia-Nicaragua
La pobreza y deseo de tener un empleo bien remunerado es lo que obliga a muchas mujeres de la comunidad El Coco, ubicada a 40 kilómetros al noreste del municipio de Quilalí, en Nueva Segovia, a emigrar.

Costa Rica, El Salvador y España se convierten en los principales destinos de trabajo para las mujeres del campo. Lidia Isabel Martínez es una de las pocas mujeres que quedan en la comunidad y según ella, su hermana se marchó para El Salvador con la esperanza de ganar y ayudar a sus hijos, porque el empleo y contratación que existe en el campo es casi exclusiva para los hombres.

Descripción

Las mujeres optan por dejar su comunidad y emigrar a países como Costa Rica, El Salvador y España. Foto: Famnuel Úbeda/Radio ABC Stereo

Según Isabel, muchas mujeres toman esta decisión porque la única oportunidad que existe de ganar dinero es para los cortes de café. "Ganar cien córdobas al día no es suficiente, a como están de caras las cosas no es fácil, se compra para una cosa y para otra no", comenta.
Quizas te interese : Bajo rendimiento y precio para el café segoviano
En tanto, doña María Margarita Siles, una mujer de 50 años de edad que está al cuido de sus nietos, asegura que hace unos años su hija mayor tomó la decisión de ir a trabajar por temporadas a El Salvador, ya que lo que ganaba en la comunidad no era la suficiente para sobrevivir. "A veces uno se queda pensando en que le puede pasar, pero confiando en Dios y en nuestra Madre Santísima, ya tiene varios ratos de estar allá, siente que gana más", expresa doña María.

Por su parte, doña Felicita González Martínez, de 52 años, manifiesta que encontrar empleo para las mujeres es difícil, por ejemplo, ella la única oportunidad de trabajo que tiene en el año es en los cortes de café, pero una vez terminada, tiene que cortar leña y venderla en tercio a las panaderías de la comunidad.

Descripción

Pobladora de la comunidad El Coco, Quilalí. Foto: Famnuel Úbeda/Radio ABC Stereo

Olga Martínez, una adolescente de la misma comunidad El Coco, asegura que hay mujeres que aguantan hambre junto a sus hijos. Ella no pierde la esperanza de superar la pobreza a través de sus estudios. "Las madres dejan solos a sus hijos para irse a trabajar, mi mamá salió del país y ahorita nos manda", cuenta.

Comparte esta noticia