Colaborador
Joel Castillo
Inocentes del delito de secuestro simple fueron declarados este jueves en juicio oral y público, Jessica Mael Flores Rivas originaria de Tipitapa y Denis Uriel Talavera Maradiaga del municipio de Quilalí en el departamento de Nueva Segovia, ambos procesados por el secuestro de una niña de cinco días de nacida de la comunidad del Olingo.
El pasado 28 de febrero, día de los hechos, Denis Uriel Talavera Maradiaga se trasladó hasta la comunidad antes mencionada ubicada en el municipio de Quilalí a bordo de una motocicleta en compañía de Jessica Mael Flores Rivas, quien se hizo pasar como enfermera.
Llegaron hasta la vivienda de Leslie Moran, a quien según la acusación bajo engaños le pidieron a la niña para llevarla supuestamente a una unidad de salud para atención médica.
Flores Rivas después de raptar presuntamente a la menor se trasladó hasta el barrio San Cristóbal en Tipitapa, departamento de Managua, donde le pidió a una amiga que cuidara a la pequeña por dos días, pero el 01 de marzo ella junto a Denis Talavera fueron detenidos e inicio el proceso judicial en su contra.
Declararon 22 testigos entre la parte acusadora y defensora concluyendo el jurado de conciencia con un fallo de no culpabilidad para ambos procesados.
El abogado defensor Gabriel Díaz, dijo que siempre confió en que demostraría que su clienta era inocente del delito que se le acusaba.
Para Díaz todo fue un convenio entre la acusada y la madre que no quería a la bebé en ese momento.
"No sé qué hubiera pasado con esa niña si mi clienta no se la ha llevado con el consentimiento de su madre", manifestó Díaz, quien dijo que lo complejo de este caso fue lo trascendental en los medios de comunicación.
Por su parte, Jessica Mael Flores Rivas aseguró que en ningún momento había secuestrado a la bebé, agradeció a Dios y dice que limpiará su nombre porque los hechos no se dieron como rezaba la acusación. ?Nunca secuestré a nadie, nunca robé a nadie?, expresó Flores.
Por su parte, Olga María Rivas Navarro, madre de la joven Jessica Mael Flores Rivas, señaló que se logró demostrar ante el jurado que jamás fueron las intenciones de su hija llevarse a la niña secuestrada.
Calificó que las autoridades de la policía hicieron una gran persecución contra su familia y que habían pruebas suficientes que demostraban que la bebé había sido regalada a su hija.
