El pasado lunes, la joven Joseling Rivas, se presentó a su lugar de trabajo sintiéndose muy mal de salud, y solo pasaron un par de horas para que decidiera ir a la Clínica Médica Previsional de esta ciudad, para averiguar lo que tenía.
Joseling Rivas labora como obrera en la fábrica procesadora de tabacos TAMBOR, donde es cotizante del seguro social y por ende, le corresponde asistir a la Clínica Previsional cuando su salud no anda bien.
Pero para esta joven, habitante del barrio Villa Esperanza de esta ciudad, la atención que recibió fue una total burla por parte de una doctora, quien asegura solo estaba sentada al lado del médico que le atendía, y esta le ofendió de la manera que menos se imaginaba.
La joven aduce que cuando enfrentó a la doctora, de la cual no consiguió saber la identidad, esta le dijo que la denunciara, que a ella le valía y ante las palabras de una profesional de la medicina, decidió hacer la denuncia pública, para tratar de reducir estos actos que dejan mucho que desear.
ENTREVISTA AFECTADA
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