Periodista
Redacción Digital ABC
Unos 360 millones de personas en América Latina padecen exceso de peso, lo que representa al 58% del total de la población en la región, afirma el Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional de la región presentado en Santiago.
El estudio conjunto de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) indica que esa condición afecta especialmente a las mujeres y que hay una creciente tendencia a la obesidad en los niños.
Haití, Paraguay y Nicaragua son los únicos países en los que el exceso de peso afecta a menos de la mitad de la población, mientras que Chile y México poseen las tasas más altas con 63% y 64%, respectivamente.
La pesquisa concluye que la principal causa de obesidad y sobrepeso apunta a un cambio en los patrones alimentarios y llama a los gobiernos a impulsar una alimentación saludable.
Por otro lado, señala una disminución en la tasa de población que pasa hambre situándose en el 5,5%, comparado con el 14,7% del periodo 1990-92, aunque subraya que aún hay más de 6 millones de niños que sufren desnutrición crónica.
Los impuestos a las bebidas azucaradas y las leyes que regulan la publicidad o el etiquetado de alimentos figuran entre las medidas destacadas para fomentar la nutrición, aunque han de aplicarse junto con estrategias que fomenten la oferta y acceso a alimentos frescos o que impulsen la agricultura familiar.
Unos 360 millones de personas en América Latina padecen exceso de peso, lo que representa al 58% del total de la población en la región, afirma el Panorama de la Seguridad Alimentaria y Nutricional de la región presentado en Santiago.
El estudio conjunto de la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS) indica que esa condición afecta especialmente a las mujeres y que hay una creciente tendencia a la obesidad en los niños.
Haití, Paraguay y Nicaragua son los únicos países en los que el exceso de peso afecta a menos de la mitad de la población, mientras que Chile y México poseen las tasas más altas con 63% y 64%, respectivamente.
La pesquisa concluye que la principal causa de obesidad y sobrepeso apunta a un cambio en los patrones alimentarios y llama a los gobiernos a impulsar una alimentación saludable.
Por otro lado, señala una disminución en la tasa de población que pasa hambre situándose en el 5,5%, comparado con el 14,7% del periodo 1990-92, aunque subraya que aún hay más de 6 millones de niños que sufren desnutrición crónica.
Los impuestos a las bebidas azucaradas y las leyes que regulan la publicidad o el etiquetado de alimentos figuran entre las medidas destacadas para fomentar la nutrición, aunque han de aplicarse junto con estrategias que fomenten la oferta y acceso a alimentos frescos o que impulsen la agricultura familiar.