Periodista
Redacción Digital ABC
LOCAL / JEYMI RIVERA
Los niños se burlaban de Tony, yo me peleaba, un día Tony, me dijo nunca voy a poder abrazar, nunca voy a estrechar una mano, nunca voy a poder servir con mis manos, si yo tuviera manos, no las usaría para la violencia y mi hermanito me ensaña lo que es la tolerancia" expresó el hermano de Tony Meléndez.
Este testimonio, brindado por el hermano mayor de Tony Meléndez, fue una de las cosas que más cautivo a los estelianos que asistieron al concierto que brindó el cantautor nicaragüense, este domingo en la ciudad de Estelí.
Muchos de los asistentes no pudieron resistirse a llorar, puesto que desde que Tony Meléndez subió al escenario, las personas se asombraban al ver cómo podía hacer tantas cosas sin importar su discapacidad y sobre todo tocar la guitarra con los pies.
Los Estelianos bailaron, cantaron, participaron de dinámicas y al finalizar el concierto, pedían a Tony Meléndez que no dejara de cantar, petición que el cantautor concedió, en el momento que la diócesis de Estelí le hizo entrega de un reconocimiento especial por el apoyo brindado.
El cantautor nicaragüense, quien ha tocado su guitarra para el ya fallecido Papa Juan Pablo Segundo y recientemente para el Papa Francisco, agradeció la asistencia de los estelianos e instó a apoyar a los jóvenes que sufren discriminación por parte de personas mal intencionadas.
"Hemos disfrutad, hay muchos ánimos, me ha encantado estar aquí, quisiera que ese sueño del hospital se haga grande, porque va a ayudar ese tipo de ayuda" sostuvo Tony Meléndez.
Tony Meléndez, se presentó este domingo en el Colegio Nuestra señora del Rosario, donde hubo gran asistencia de la comunidad católica, que disfrutó de la santa misa previo al concierto y durante el mismo presenciaron la dura historia de vida del cantautor, que tuvo que migrar con su familia hacia Estados Unidos, para poder tratar su discapacidad.
Cabe destacar que con los fondos de este concierto se pretende llevar a cabo la construcción del hospital Juan Pablo Segundo, proyecto que trabaja la Diócesis de Estelí y que Tony Meléndez, manifestó querer ver hecho realidad.
